Este día se celebra para conmemorar la firma, en el año 1950, del Convenio de Creación de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), como organismo de Naciones Unidas para asegurar la cooperación internacional en materia meteorológica. La meteorología es la ciencia que estudia la atmósfera, el estado del tiempo atmosférico, los fenómenos de distintos tipos que se producen en ella y las leyes o procesos físicos que los rigen y los controlan.
Los fenómenos meteorológicos son de distintos tipos, unos tienen al agua como protagonista esencial, como son los hidrometeoros del tipo de: las nubes, la lluvia, la niebla, la nieve, el granizo, la escarcha o el rocío; a veces los fenómenos meteorológicos son eólicos, con el viento como agente principal, es el caso de los vendavales o tornados; en ocasiones son eléctricos, relacionados con la posibilidad de descargas eléctricas, caso de los relámpagos y rayos; trasmitidos por procesos acústicos como los truenos. Luminosos como las espectaculares auroras boreales, o líticos como las tradicionales calimas de las Canarias y otras zonas del globo.
Los fenómenos meteorológicos son de distintos tipos, unos tienen al agua como protagonista esencial, como son los hidrometeoros del tipo de: las nubes, la lluvia, la niebla, la nieve, el granizo, la escarcha o el rocío; a veces los fenómenos meteorológicos son eólicos, con el viento como agente principal, es el caso de los vendavales o tornados; en ocasiones son eléctricos, relacionados con la posibilidad de descargas eléctricas, caso de los relámpagos y rayos; trasmitidos por procesos acústicos como los truenos. Luminosos como las espectaculares auroras boreales, o líticos como las tradicionales calimas de las Canarias y otras zonas del globo.

Las gotas frías, como las de octubre del año 2000 que afectaron a la vertiente mediterránea, especialmente en grandes áreas de Cataluña, de la Comunidad Valenciana y de la Región de Murcia, cuyas lluvias torrenciales superaron los 250 mm en la provincia de Castellón y los 500 mm en Valencia. O son los responsables de riesgos añadidos como los producidos por las tormentas, las inundaciones y/o avalanchas, o las olas de calor.…
En definitiva, cada año las catástrofes naturales asociadas a dichos fenómenos causan alrededor de 250.000 víctimas y otros cientos se debieron a fenómenos meteorológicos y climáticos extremos que seguirán aumentando progresivamente con el cambio climático. Por lo que quizás debamos preguntarnos sino ¿es hora de actuar? para intentar controlar el denominado cambio climático, al parecer responsable del incremento de los fenómenos meteorológicos apuntados.
A. del Río-M.S. Martinez-Falero.